¿Qué tal va el mes de septiembre?¿Ya habéis engrasado la máquina?Espero que sí.
Yo hoy me he calzado mis zapatones, me he puesto mi nariz de payaso y me he ido a jugar con la gente a un fiesta infantil solidaria que organizaba SETEM en el parque Pignatelli (os lo apunté en mi agenda, estad pendiente de ella porque seguiré anotando acontecimientos). Siempre está bien hacer de payaso pero cuando es por una buena causa muchísimo mejor.
Me lo he pasado fenomenal y una vez más LOS NIÑ@S me han vuelto a dar una lección. Estaba actuando y entre juego y juego he hecho el comentario (en broma) "¿A ver quién me invita a comer?". No han pasado ni dos segundos cuando un niño de 4 años se me ha acercado y me dice: "Kikote vente a comer a mi casa". ¿Qué os parece? Yo me he quedado alucinado, SIN PALABRAS. ¿Cuántos de nosotros invitaríamos a alguien a comer solamente con oirle decir que si alguien le invita?.Cuantas cosas cambiarían si fuéramos más generosos y menos mirados. Aquí os dejo mi experiencia y mi reflexión de hoy.
Por cierto, los niños que también me dejaron SIN PALABRAS hace tiempo son éstos con los que os dejo, espero que los disfrutéis.
Un besazo de payaso y feliz semana a tod@s
